El presidente de la Asociación de Empresarios de Alojamientos Turísticos (AEAT), Tom Smulders, ha rechazado “tajantemente” en nombre de la agrupación que preside el proyecto de prolongación del espigón en El Faro de Maspalomas, una negativa “fulminante” en la que “los 11 directivos de la Junta coincidimos”, señaló.
Como ha declarado Smulders, este proyecto es “totalmente innecesario e incoherente” porque desde la patronal “se hace todo lo posible por fomentar un destino ecológico y cauto en la gestión medioambiental”, sobre todo en lo relativo “a la protección de las corrientes marinas y la reconstrucción del ecosistema dunar de Maspalomas” dentro del proyecto “MasDunas”.
“Este proyecto no cabe en un modelo de turismo sostenible”, precisó el representante de los extrahoteleros.
Según ha valorado la Junta de la AEAT, socios de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Las Palmas (FEHT), existe “un puerto deportivo muy cerca, en Pasito Blanco”, por lo que no consideran que “un monumento emblemático como El Faro de Maspalomas deba ser lugar de “parada de guaguas para excursiones turísticas” y mucho menos “para actividad recreativa como motos acuáticas, con las molestias que conllevan”.
Para Smulders, la principal preocupación “es el medio ambiente y la protección del ecosistema”, por lo que desde la asociación se han declarado “en contra de todas las líneas que puedan interferir con el proyecto MasDunas” de reconstrucción del parque natural de las Dunas, promovido por el Cabildo de Gran Canaria.
Ampliación de 210 metros
La obra de prolongación del espigón del Faro de Maspalomas, publicado en el BOE y a cargo de la empresa Dismare Inmobiliario, tiene prevista aumentar el espigón 210 metros y la superficie hasta los 4.886 metros cuadrados, con un perímetro de 505 metros, para crear un servicio de embarque y desembarque de usuarios de barcos turísticos, con un presupuesto de 3,6 millones de euros en el extremo oeste de la Zona de Especial Conservación conocida como “Sebadales de Playa del Inglés” con delimitación en el tramo entre Faro de Maspalomas – El Hornillo.
La obra aborda dos tramos para acoger el desembarco de embarcaciones de excursiones turísticas, con uno de 119 metros de longitud y 15 metros de anchura y otro de 103,05 metros de longitud y 30 metros de anchura, además de una distribución de duques de alba con una plataforma flotante para conectar el espigón al pantalán de 12 metros de largo, donde podrán atracar barcos de hasta 21 metros de eslora, como máximo.
El objetivo del embarcadero, de acuerdo al proyecto el ingeniero de caminos, canales y puertos, Ángel Colsa, es cubrir la demanda de puntos de embarque en esta zona turística y de esta manera, según versa el documento “ordenar el espacio, poner en valor la playa y mejorar la oferta de ocio en el propio entorno del Faro” fomentando “productos alternativos de calidad que comporten mayores equipamientos y que conformen una imagen de destino turístico vinculada a un tipo de oferta cualificada”.
