La población del municipio de San Bartolomé de Tirajana cada vez recicla más y mejor, según se desprende de los índices de separación correcta de residuos realizada por la ciudadanía durante el año 2015, donde los valores se han incrementado respecto a los dos años precedentes.
En ese sentido, durante el 2015 en San Bartolomé de Tirajana se reciclaron casi 3,5 millones de kilos de vidrio; 584,1 toneladas de papel y cartón; 437.620 kilos de envases plásticos; 5.962 litros de aceites domésticos; cerca de 1,3 millones de kilos de poda biodegradable y 99.700 kilos de ropa y calzado usados.
Todo indica que el paulatino aumento de los contenedores específicos que se están instalando por todo el municipio y las sucesivas campañas promocionales que el Ayuntamiento ha ido desarrollando con apoyo de las empresas gestoras para facilitar la separación de residuos y concienciar a su vecindad respecto a los beneficios del reciclaje, están surtiendo efecto y contribuyendo claramente a la obtención de mejores cotas en los depósitos y recogida de vidrio, envases plásticos ligeros y de papel y cartón.
Datos significativos
Especialmente significativos son los datos sobre la recogida selectiva en los vertidos de vidrio. Durante el año pasado, la vecindad de San Bartolomé de Tirajana separó y recicló 3.466.842 kilos de vidrio, casi 519.000 kilos más que durante el año 2014.
También es plausible la labor que esta población está realizando diariamente con la separación de papel y cartón. En el año 2015 esa labor recuperadora se saldó con una recogida total de 584,1 toneladas, unos 44.480 kilos más que durante el año 2014 y unos 99.440 más que en el año 2013.
Y lo mismo ocurre con la recogida selectiva de los envases plásticos y ligeros destinados a los contenedores amarillos. Durante el 2015 se recogieron 437.420 kilos, unos 112.740 kilos más que en año 2014 y 159.780 kilos más que durante el año 2013.
El concejal Fernando González Montoro, responsable del área municipal de Ordenación del Territorio y Políticas Ambientales, admite que “aunque los datos son buenos y cada vez más mejores y esperanzadores, todavía falta mucho por hacer”.
“La labor que los vecinos y vecinas de este municipio tenemos por delante respecto a la separación y reciclado de residuos domésticos todavía es enorme. Lo seguirá siendo mientras veamos un sólo papel o colilla de tabaco en el suelo; mientras veamos bolsas con basuras domésticas en las papeleras de las calles y parques; mientras veamos muebles y electrodomésticos en las calles; mientras veamos escombreras en nuestros barrancos y barranquillos o incluso en las inmediaciones de los contenedores; mientras veamos latas de refrescos y botellas fuera de sus respectivos contenedores. No es una labor fácil. Requiere de la educación y el compromiso individual de cada uno, y está claro que será la suma de todas las acciones individuales lo que permita lograrlo. No existen fórmulas mágicas, sino constancia y educación ciudadanas”, afirma González Montoro.
