Los problemas para la información y la presentación de alegaciones se suceden en San Bartolomé de Tirajana.
Nueva Canarias de San Bartolomé de Tirajana denuncia ante la opinión pública la actitud negligente y la falta de cooperación del Gobierno del municipio para con el proceso de exposición pública y recepción de alegaciones del Plan General de Ordenación. Ello se sustenta en tres hechos evidentes y sufridos por los ciudadanos que hasta este documento se han acercado:
1.- El proceso de información ciudadana ha tenido que ser prestado por los concejales y grupos políticos de la oposición municipal. El Grupo de Gobierno, al margen de la presentación pública del documento en un local municipal de San Fernando, ha abandonado a los vecinos a su suerte; ha rechazado acudir a los barrios a explicar el documento, acompañados por los técnicos redactores u otro personal cualificado
2.- Ha negado la participación de los técnicos municipales y vetado la de los técnicos de Gesplan, en las charlas informativas auspiciadas por los grupos de oposición, concejales también de la corporación que en el ejercicio de su obligación si han ido a los barrios y ayudado a los vecinos del municipio. Muy al contrario, sabedores de la exposición pública del PGOs no modificaron el Plan de vacaciones ni pidieron a Gesplan que hiciera lo propio, con lo que el deber de información se ha visto muy mermado y deficientemente atendido por el personal municipal, saturado de tarea e insuficientemente adiestrada previamente para estas lides.
3.- No han fortalecido el servicio de atención al público en el Registro General del Ayuntamiento, con lo que la recepción de alegaciones ha colapsado el día a día de las oficinas municipales, ha cabreado sobremanera a los ciudadanos que han tardado hasta dos horas en registrar un documento y han sembrado la zozobra entre el personal por las tensiones innecesariamente propiciadas.
Estamos persuadidos que al PP-AV de San Bartolomé de Tirajana ninguna gracia le ha hecho afrontar la contestación social producida por este documento que, sin duda, está ya definitivamente lastrado por el cúmulo de alegaciones recibidas
