El coordinador de Izquierda Unida Canaria (IUC), Ramón Trujillo, ha afirmado que “la Ley de Transparencia y de Acceso a la Información Pública, aprobada esta semana por el Parlamento de Canarias, equivale a pretender curar un cáncer con tiritas. Pues sus señorías pretenden responder a la indignación ciudadana por la corrupción masiva y los déficits democráticos con una norma claramente insuficiente para abordar la gravedad del deterioro institucional actual. El Parlamento lanza fuegos de artificio para ocultar que no hace lo que debiera hacer”.
Para el portavoz de IUC, “el Parlamento canario no ha sido capaz de aportar soluciones al hecho de que los municipios canarios sufran casi cinco veces más corrupción que los del resto del Estado, o que, en el caso de Tenerife, la Justicia investigue a integrantes del 58% de los gobiernos municipales. El Parlamento de Canarias tampoco ha sido capaz de modificar la ley electoral con se rige, la menos democrática de Europa, ni de comprometerse a debatir todas las iniciativas legislativas populares, ni de debatir con todos los actores sociales la reforma del Régimen Económico y Fiscal, que ha sido ampliamente criticada por su opacidad”.
Desde IUC se reconoce que la Ley de Transparencia canaria conlleva elementos positivos, “pero se hace precisamente porque no es lo más necesario para regenerar de verdad la política. Hay que recordar que México cuenta con una de las mejores leyes de transparencia del mundo, pero al fallar en otros elementos fundamentales para un sistema democrático, difícilmente podría ser mostrado como un estado democrático ejemplar”.
