Paulino Rivero, presidente del Gobierno de Canarias, ha asegurado que su Gobierno no aplicará recortes presupuestarios el próximo año en los servicios públicos esenciales, y que seguirá defendiendo estos servicios "contra viento y marea" y no dará "ni un paso atrás" en su apuesta por la sanidad, la educación y las políticas sociales.
En su blog, Paulino Rivero ha dicho que a pesar de las restricciones derivadas de una política estatal centrada en la reducción del gasto, el Gobierno de Canarias "hará los esfuerzos que sean necesarios para garantizar no sólo la gratuidad de la educación y la sanidad, sino una eficiente prestación de estos servicios frente a las soluciones por las que han optado otros y que se han concretado en el cierre de colegios o la privatización de hospitales".
El presidente ha aseverado que pese a los nuevos recortes en los fondos procedentes del Estado y de la reducción de los límites de déficit y endeudamiento, el Ejecutivo canario está comprometido "hasta el tuétano" con los servicios públicos y "no va a permitir que se deterioren unas prestaciones a las que los ciudadanos tienen derecho".
Rivero ha querido dejar claro que la educación está "en lo más alto" de las prioridades del Gobierno que preside, de ahí que el próximo curso se vaya a dar "un paso más" en la mejora de la oferta de plazas y de títulos en todas las enseñanzas profesionales, así como en materia de becas, comedores y desayunos escolares, obras y reformas en los centros, o préstamo de libros.
Según el mandatario canario, "son algunos hechos que, junto a la entrada en vigor de la Ley Canaria de Educación --pendiente de su desarrollo normativo-- marcarán un inicio de curso en el que haremos todo lo posible por amortiguar las consecuencias más nocivas de la implantación de la LOMCE".
Por último, quiso agradecer a toda la comunidad educativa, especialmente al profesorado, el compromiso y la responsabilidad que han demostrado durante estos últimos años, en los que la normalidad "se ha convertido en un gran valor", y subrayó que el Gobierno seguirá "inalterable" en su defensa de la escuela pública y de los valores inherentes a ésta a pesar de las dificultades actuales.
