José Miguel Bravo de Laguna comenzó su 'defensa' en el pleno extraordinario dando difusión a unas declaraciones de Cristoval Rodríguez Marichal en Radio Sol, en las que el empresario acusaba al presidente del Cabildo y a Lopesan de tener una actitud "chulesca", así como de afirmar que RIU "no está por detrás sino por delante".
Al respecto, el presidente ha llegado a una serie de conclusiones, entre las que destacó que desconoce de qué se le acusa, si bien barajó que se le podría estar acusando de "hacer o proyectar no sé que negocio con Rodríguez Marichal para beneficiar al Centro Comercial Oasis", lo que negó, asegurando que "jamás" ha hecho "ningún negocio".
Otra de las cuestiones que barajó es de "compincharse con Lopesan para sacar provecho", recordando que se rechazó la propuesta de dicha empresa sobre el BIC, o que se tenía que haber abstenido en la tramitación de expediente del BIC por "tener intereses ocultos", lo que también aseguró "es falso".
Para Bravo de Laguna todo responde "a un montaje bien urdido por algunos expertos en corrupción como puede ser el señor Olarte, que dice que asesora a este señor --Marichal--". Agregó que "a esto no hay derecho" por ser un "ataque miserable porque mezcla" a su hija y hermana para volver a cuestionarse de qué se le acusa.
Al ser preguntado por las cláusulas de uno de los contratos que habría suscrito con Rodríguez Marichal cuando le asesoraba en relación a la rehabilitación del Centro Comercial Oasis, y en el que se establecía unas cláusulas que exponían beneficios de hasta un millón de euros en caso de que se alcanzaran los objetivos finales, reconoció que este acuerdo se produjo antes de pensar volver a la política, así como aseguró que pensó que esos fines no se iban a alcanzar.
Si bien, afirmó que lo que ha recibido por asesorar a Marichal en 2009 fueron "18.000 euros". Ante esta situación que Bravo de Laguna ha calificado de "ensañamiento periodístico" por ser portada de un medio de comunicación de Canarias durante "22 días", concluyó subrayando: "me pueden acribillar moralmente, y algunos querrán quizás hasta físicamente, pero no me van a encontrar de rodillas, me van a encontrar de pie".
Por su parte, el portavoz de Coalición Canaria (CC) en el Cabildo, Fernando Bañolas, consideró que "existe responsabilidad política y ética" de Bravo de Laguna, al tiempo que lo acusó de mentir por decir una cosa y después reconocer otra en relación a los encuentros que ha mantenido con Rodríguez Marichal.
Al respecto, Bañolas le dijo al presidente de la institución grancanaria que "se ha reunido en su antiguo despacho. Usted se puede reunir con quien quiera pero en el Cabildo", y es en esta cuestión donde el portavoz nacionalista consideró que existe "una parte importante de su responsabilidad política".
La portavoz del PSOE en el Cabildo, Carolina Darias, por su parte, también ha acusado a Bravo de Laguna de mentir porque "su palabra se va quedando sin valor y sin credibilidad". La socialista también ha pedido explicaciones sobre un ingreso realizado por la coordinadora de turismo de la institución insular para formar una sociedad.
Darias ha señalado que "todo indica a que no ha separado el ámbito privado --del despacho de abogados de Bravo de Laguna-- con lo público", mostrando así su decepción.
El portavoz de Nuevas Canarias (NC) en la institución insular, Carmelo Rodríguez, dijo que aunque el presidente del Cabildo debe despejar las dudas en relación a si ha tenido participación en favor de intereses privados, subrayó que respetan la presunción de inocencia hasta que no se demuestre lo contrario.
En este sentido, basan sus argumentos para abstenerse en la propuesta de comisión de investigación realizada por PSOE y CC al respecto, ya que matizan que se trata de una cuestión en la que está investigando la Fiscalía de Las Palmas y creen necesario esperar a que se pronuncie.
Finalmente, el portavoz del Grupo Popular, Carlos Sánchez, ha defendido el ejercicio "de transparencia" realizado por el Cabildo de Gran Canaria en la tramitación del expediente del BIC del Oasis.
